martes, 7 de junio de 2011

Hay tantos placeres que no tienen precio

Hay tantas cosas que no hacemos simplemente porque no se nos ocurren y en cambio hacemos casi todo lo que por rutina nos obligamos .Vemos las noticias, leemos el diario ,ordenamos las cosas que ya estaban ordenadas y dejamos de conversar, reir, caminar, mirar atardeceres o celebrar la luna nueva.
¿Porqué? Nadie nos obliga ,simplemente lo hacemos por inercia.
Hace 20 años que habito la montaña y recién hace unos meses salí de mi letargo y corrí a conocerla. A caminar el otoño de caminos crugientes, a escuchar la melodía que me susurra el río mientras hace brotar espuma al acariciar las rocas. Saludar a las parras que trepan libres los quillayes y ofrecen el banquete de sus postreros frutos a los alborotados tordos, contemplar una
a lluvia dorada que una brisa me brinda al borde del arroyo,cuando desnuda los robles de pequeñas hojas amarillas.
Ya no leo El MERCURIO que me mantuvo informada tanto tiempo, pero me entero del quehacer del viejo jardinero que cuenta de sus flores, de la señora que amasa en su casita humeante, de la profesora que adora la clase que le tocó este año y que baja conmigo a veces la montaña.Y he encontrado que estas noticias tienen que ver conmigo y me interesan . Más que la guerra de algún país lejano o el matrimonio de un príncipe de cuento de hadas .
Tal vez tanto aire puro me tiene emborrachada

sábado, 28 de noviembre de 2009

Necesidades

Adivinamos las necesidades de los nuestros y generalmente excluimos las nuestras como si fuéramos algún vecino lejano a quien no tenemos ninguna obligación de cuidar
Estamos atentas al mínimo estornudo ,a la lágrima furtiva , al cansancio escondido.Buscamos como detectives cualquier carencia para suplirla antes que duela.
Mis necesidades se cubren con el derroche de cariño de mis hijos y nietos que derraman diariamente alegrías en el armario de mi alma.
Si tuviera que reclamarle a la vida,le pediría tiempo ,bien escaso ,por eso tan preciado,ley de mercado .Lo ocuparía picando piedra , esparciendo palabras en interminables frases hiladas ,como cuentas de un collar hecho de metáforas , para pintar emociones,
Mi barco me llevaría a un rincón de sueños , donde vive el perdón y las manos se unen sin rencor
Creo que el Señor me ha dado y quitado para abonar mi espíritu en una especie de agricultura que escarba para esponjar la tierra. Me ha regalado mil semillas para cultivar en actividades tan diversas como flores de estación y mi carencia está en en la imposibilidad de sembrarlas todas en el escaso tiempo que me queda

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Descubrir lo simple

¡Antes muerta que sencilla ! reza una canción española. Lo simple suele ser casi un insulto

Sin embargo en estos ajetreados tiempos parece que lo simple es un lujo .

Un momento de paz en medio de esta locura pasa a ser un bien preciado

La comida casera ,servida en la mesa del comedor ,en vez de bandejeada al dormitorio.

La sobremesa arrastrada hasta el atardecer con té y agua de hierbas para compartir

sucesos intracendentes y miradas cariñosas .

El chaleco de lana tejido a mano por la madre o la abuela que te abraza entregando

el calor sencillo del amor.

Paseo mis recuerdos por jardines de ajadas petunias ,erguidas amapolas y rebeldes margaritas

Noches de verano mirando el limpio cielo en busca de la estrella fugaz para pedir algún escondido

deseo

Tantas dulzuras pequeñas en el recodo del alma celebran la hermosura de lo simple

viernes, 7 de agosto de 2009

Cuando meditar es escucharse el alma

La palabra meditación traía a mi memoria un personaje chascón sentado con las piernas cruzadas

Hoy asumo que la meditación es la escucha en silencio del compás del alma.Cuantas veces deseo

encontrarme a solas para oir esa melodía que Dios escribió en mi ser. Tal vez no es necesario

arrinconarse en un refugio sino mas bien refugiarse en la entereza de espíritu para ofrecer

esa música divina a quienes nos rozan con sus propias vidas y compartir esa meditación en una

alegoría de amistad .,sonrisa abrazos y acuosas miradas llenas de emoción

jueves, 9 de abril de 2009

La gracia de tener ángeles en el nombre

Es extraño ,pero siempre me molestó mi nombre .¿Como se les ocurrió llamarme Angeles y
agregarle Amparo ? ¡Que falta de respeto ! ¡¡Redundante!!
Sin embargo ,ahora que doblo la esquina de la vida , siento que el odiado nombre me protege,
y acoge como este sentimiento insólito que me hace amar a todo el mundo.
Recuerdo el asco que me daban los niños sucios ,los enfermos, los pobres, los viejos.
Hoy me florece una tonta dulzura frente al otro y me siento enamorada de la vida
Tal vez será que estoy a punto de dejarla y como todo lo antiguo y escaso ,ley de mercado,
la siento mas preciada y me reflejo en todas las miradas y me parece bañarme en agua de
lágrimas contenidas en mi nombre Amparo